TENGO PREGUNTAS SOBRE EL CÁNCER DE CUELLO UTERINO

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Detección Temprana

Si todas las mujeres tuvieran exámenes de la pelvis y pruebas de Pap, (abreviación de Papanicolaou) con regularidad, la mayoría de las condiciones precancerosas se detectarían y tratarían antes de que se volvieran cancerosas. De esa forma, se podría prevenir la mayoría de los cánceres invasores. Cualquier cáncer invasor que se presenta ahora, habría sido encontrado en una etapa temprana, curable. En un examen de la pelvis, el médico examina el útero, la vagina, los ovarios, las trompas de Falopio, la vejiga y el recto. El médico palpa estos órganos buscando cualquier anormalidad en su forma o tamaño. Se usa un espéculo para ensanchar la vagina, para que el médico pueda ver la parte superior de la vagina y el cuello del útero o cérvix. La prueba de Papanicolaou es una prueba sencilla, sin dolor, para detectar células anormales en el cérvix o en su derredor. La mujer deberá presentarse para esta prueba cuando no esté menstruando; el mejor tiempo para hacerlo es de 10 a 20 días después del primer día de su período menstrual. Dos días antes de la prueba de Pap, ella deberá evitar hacerse lavados vaginales o usar espumas, cremas o lubricantes espermicidas, o medicamentos para la vagina (a excepción de lo que ordene el médico), lo cual podría lavar u ocultar cualquier célula anormal. Una prueba de Pap se puede hacer en el consultorio del médico o en una clínica de salud. Se usa un raspador de madera (espátula) y un cepillo pequeño para recoger una muestra de células del cuello del útero y de la parte superior de la vagina. Las células se colocan en un portaobjetos de vidrio que se envía al laboratorio médico para su examen. La forma como se reportan los resultados de la prueba de Pap está cambiando. El método más nuevo es el Sistema Bethesda. Los cambios se describen como lesión intraepitelial escamosa de bajo grado o de alto grado. Muchos médicos piensan que el Sistema Bethesda proporciona información más útil que el sistema anterior, el cual usa números que van de clase 1 a clase 5. (En la clase 1, las células en la muestra son normales, mientras que la clase 5 se refiere a cáncer invasor). Las mujeres deben pedir al médico que les explique el sistema usado en su prueba de Pap. Las mujeres deben hacerse exámenes con regularidad, incluyendo un examen de la pelvis y una prueba de Pap, si son activas sexualmente o lo han sido, o si tienen 18 años o más. Las que tengan un riesgo mayor de desarrollar cáncer del cuello del útero deben tener cuidado especial en seguir la recomendación de su médico en cuanto a los exámenes. Las mujeres a quienes se les haya practicado una histerectomía (cirugía para extraer el útero, incluyendo el cérvix) deben pedir el consejo del médico acerca de los exámenes pélvicos y las pruebas de Papanicolaou.

Que es el examen de Papanicolaou

El examen del Papanicolaou (llamado en algunos países citología o simplemente Papanicolaou) es una forma de examinar las células recogidas del cuello uterino, o de la "boca" de la matriz (localizada en la parte de arriba de la vagina), para detectar la presencia de:
  • Infecciones.
  • Inflamación.
  • Células anormales.
  • Cáncer
¿Porqué se le recomienda el examen de Papanicolaou a las mujeres? Un examen de Papanicolaou, junto con un examen pélvico, es una parte importante de la rutina para el cuidado de la salud de la mujer porque puede detectar anormalidades que pueden llevar al cáncer invasivo. La mayoría de los cánceres invasivos del cuello uterino pueden detectarse temprano si la mujer tiene exámenes de Papanicolaou y pélvicos regularmente. Así como con otros tipos de cáncer, es más probable tener éxito tratando el cáncer del cuello uterino si se detecta temprano. El examen del Papanicolaou sirve para detectar las células cancerosas, así como otras anormalidades cervicales y vaginales que incluyen la displasia (células precancerosas) y la inflamación. La inflamación puede ser causada por:
  • Infecciones de honguillos
  • Infecciones de tricomoniasis.
  • Bacterias.
  • Virus.
  • Medicamentos u otros químicos.
  • Hormonas.
  • Embarazo.
  • Abortos espontáneos (o clínicos)
¿Quién debería tener un Papanicolaou? Las mujeres deberían consultar siempre al médico acerca de la fecha y la frecuencia para la realización del Papanicolaou y el examen pélvico. Según el Instituto Nacional del Cáncer (National Cancer Institute, su sigla en inglés es NCI), la Sociedad Estadounidense del Cáncer (American Cancer Society, su sigla en inglés es ACS), y el Colegio Estadounidense de Obstetricia y Ginecología (American College of Obstetrics, su sigla en inglés es ACOG), las pautas generales incluyen: Las pruebas de detección del cáncer cervical se deben iniciar aproximadamente a los tres años de que la mujer comenzó a tener relaciones sexuales, pero no después de los 21 años de edad. Los expertos recomiendan esperar aproximadamente tres años después de la iniciación de la actividad sexual porque las infecciones por papilomavirus humano (su sigla en inglés es HPV) transitorias y los cambios celulares cervicales no significativos son frecuentes, y una anomalía significativa o cáncer tarda años en desarrollarse. El cáncer cervical es muy poco frecuente en mujeres menores de 25 años. La prueba de Papanicolau permite al médico detectar los cambios anormales en el cuello uterino. Si estos exámenes muestran que hay presente una infección, el médico trata la infección y después de un tiempo repite la prueba de Pap. Si el examen o la prueba de Pap sugieren algo más que una infección, el médico puede repetir la prueba de Pap y hacer otras pruebas para encontrar el problema La colposcopia es un método usado ampliamente para examinar el cuello del útero para áreas anormales. El médico aplica una solución como de vinagre al cérvix y luego usa un instrumento que parece un microscopio (llamado colposcopio) para mirar de cerca el cérvix. El médico puede entonces cubrir el cuello uterino con una capa de solución de yodo (un procedimiento que se llama prueba de Schiller). Las células sanas adquieren un color café; las células anormales adquieren un color blanco o amarillo. Estos procedimientos pueden hacerse en el consultorio del médico. Las pruebas pueden no mostrar con seguridad si las células anormales se encuentran sólo en la superficie del cérvix. En ese caso, el médico removerá entonces una muestra más grande de tejido en forma de cono. Este procedimiento, llamado conización o biopsia de cono, permite que el patólogo vea si las células anormales han invadido el tejido bajo la superficie del cérvix. Es posible que el médico quite una pequeña cantidad de tejido cervical para que sea examinado por un patólogo. Este procedimiento se llama biopsia. En un tipo de biopsia, el médico usa un instrumento para desprender muestras pequeñas de tejido cervical. Otro método usado para obtener una biopsia se llama procedimiento de escisión electroquirúrgica con asa (LEEP en inglés). En este procedimiento, el médico usa un aro de alambre eléctrico para rebanar un pedazo delgado y redondo de tejido. Estos tipos de biopsias se pueden hacer en el consultorio del médico usando anestesia local. El médico podría revisar también, dentro de la abertura del cérvix, un área que no se puede ver durante la colposcopia. En un procedimiento llamado curetaje endocervical (ECC en inglés), el médico usa una cureta (un instrumento pequeño en forma de cuchara) para raspar el tejido dentro de la abertura cervical. Las mujeres deberían someterse a una prueba de Papanicolaou por lo menos una vez cada dos años. La Sociedad Estadounidense del Cáncer (American Cancer Society, su sigla en inglés es ACS) y el Colegio Estadounidense de Ginecología y Obstetricia (American College of Obstetrics and Gynecology, su sigla en inglés es ACOG) recomiendan un estudio de detección de citología cervical con pruebas de Papanicolaou regulares o estudios de detección bianuales (cada dos años) con pruebas de citología líquida (técnica Thinprep) hasta los 30 años. Las mujeres menores de 30 años tienen mayores probabilidades que las mujeres más ancianas de contraer tipos de HPV de alto riesgo que pueden ocasionar enfermedad cervical premaligna, afección que debe descartarse antes de ampliar los intervalos de estudio. La ACS y el ACOG recomiendan a las mujeres con tres resultados normales seguidos someterse a estudios de detección cada dos a tres años a partir de los 30 años de edad. Sin embargo, las mujeres con ciertos factores de riesgo, como una infección por el virus de inmunodeficiencia humana (VIH), un sistema inmune débil, exposición intrauterina al dietiletilbestrol (su sigla en inglés es DES), o un diagnóstico previo de cáncer cervical pueden necesitar estudios de detección más frecuentes. Las mujeres de 65 a 70 años de edad que han tenido por lo menos tres pruebas de Papanicolaou normales y ninguna anormal en por lo menos 10 años pueden decidir, en consulta con su profesional de la salud, suspender las pruebas de detección de cáncer de cuello uterino. Las mujeres a quienes se les ha practicado una histerectomía total (extirpación del útero y cuello uterino) no necesitan someterse a pruebas de detección de cáncer cervical, a menos que la cirugía se haya realizado como tratamiento para la etapa previa al cáncer o para el cáncer cervical. Las mujeres deben buscar asesoramiento médico experto sobre cuándo deben comenzar a realizarse las pruebas de detección, con qué frecuencia deben realizarlas y cuándo pueden interrumpir la realización de las pruebas de detección cervical, en especial si tienen un riesgo mayor que el riesgo promedio debido a factores como la infección por VIH. Resultados de la Prueba de Papanicolaou Una prueba de Papanicolaou o citología será interpretada como de resultado negativo cuando no se identifiquen células anormales. En este caso, se le aconsejará que vuelva a hacerse una citología de rutina transcurridos 3 años Entre un 5 y un 10% de las mujeres tendrán un resultado anormal en la prueba de Papanicolaou o citología. Es importante recordar que unos resultados anormales en la prueba de Papanicolaou o citología no implican que se esté afectado por un cáncer. Sin embargo, unos resultados anormales pueden ser un signo de aviso. Indican que se tiene un riesgo más elevado de desarrollar un cáncer de cuello uterino. De esta manera, en este caso es importante seguir el consejo del médico para minimizar el riesgo. Mediante el seguimiento de las recomendaciones de su médico se asegurará que el tratamiento caso de que sea necesario, pueda iniciarse de forma temprana, antes de que el cáncer se desarrolle. Los tratamientos tempranos son simples y altamente eficaces

Reconociendo los problemas ginecológicos

Signos y síntomas ginecológicos que pueden requerir atención médica: El sangrado y la secreción vaginal constituyen aspectos normales de los ciclos menstruales anteriores a la menopausia. No obstante, si observa algo diferente o poco común, es necesario hacer una consulta con el médico; no intente resolver el problema por usted misma. Los síntomas pueden deberse a la presencia de infecciones leves de fácil tratamiento. Pero si esas infecciones no se tratan en forma adecuada, pueden dar origen a condiciones más graves, como infertilidad o daños renales. Los síntomas vaginales también pueden constituir un signo de problemas más graves, desde enfermedades de transmisión sexual (su sigla en inglés es STD) hasta cáncer del tracto reproductor. Los síntomas ginecológicos pueden parecerse a los de otras condiciones médicas o problemas urológicos. Siempre consulte a su médico para el diagnóstico. Si tiene alguno de los síntomas que mencionamos a continuación, consulte con su médico:
  • Sangrado entre períodos menstruales.
  • Necesidad frecuente e imperiosa de orinar, o ardor durante la micción.
  • Sangrado vaginal anormal, en particular durante o después de tener relaciones sexuales.
  • Dolor o presión en la pelvis, diferente de los dolores menstruales habituales.
  • Picazón, ardor, inflamación, enrojecimiento o dolor en el área vaginal.
  • Úlceras o nudos en el área genital.
  • Secreción vaginal con olor desagradable o poco común o de color no habitual.
  • Aumento de la secreción vaginal.
  • Dolor o incomodidad durante el coito.
  • El reconocimiento temprano de síntomas y la consulta inmediata aumentan las probabilidades de que el tratamiento tenga éxito.

Factores de Riesgo

Las verrugas genitales son causadas por el virus papilloma humano (HPV por sus siglas en inglés). El HPV es una familia de más de 100 virus muy comunes. Muchos tipos de HPV causan verrugas en la piel sin dolor, como las de los dedos o pies. Se piensa que sólo algunos tipos específicos de HPV causan verrugas genitales. El HPV se expande con facilidad durante relaciones sexuales orales, genitales o anales con una pareja infectada. Cerca de dos tercios de la gente que tiene contacto sexual con una pareja que tiene verrugas genitales también las desarrollará, por lo común en tres meses después del contacto La mayoría de la gente está expuesta a una forma de HPV en algún punto de sus vidas, aunque no todos se infectarán o desarrollarán los síntomas. Las verrugas pueden aparecer en pocas semanas después del contacto sexual con una persona infectada o a veces puede llevar meses. Complicaciones del HPV: Cáncer La mayoría de las variedades del HPV que producen verrugas genitales no causan cáncer. Pero ciertas clases de HPV pueden causar cáncer cérvico o, en pocas ocasiones, cáncer de la vulva, ano o pene. Debido a esto, es muy importante que las mujeres se practiquen el papanicolaou anualmente para detectar anormalidades relacionadas con el HPV. Complicaciones de Embarazo/Nacimiento Las verrugas genitales pueden crecer durante el embarazo, las cuales pueden dificultar la capacidad de orinar. Si las verrugas están cerca de la abertura vaginal, pueden obstruir el canal de nacimiento durante el parto. Factores de Riesgo Un factor de riesgo es aquello que aumenta la probabilidad de adquirir una enfermedad o afección. Los siguientes indicios aumentan la probabilidad de contraer HPV y/o verrugas genitales:
  • Edad: 15-30 años
  • Relaciones sexuales con parejas múltiples
  • Tener relaciones sexuales sin condón
  • Contacto de piel a piel con una pareja infectada
  • Historial previo de verrugas genitales
  • Embarazo
Síntomas Las verrugas genitales con frecuencia parecen abultamientos carnosos en forma de coliflor. Aparecen con frecuencia en la piel en forma de grupos. En las mujeres, las verrugas pueden encontrarse en las siguientes áreas:
  • Vulva o vagina
  • Dentro o alrededor de la vagina o ano
  • Cuello uterino
En los hombres, las verrugas genitales son menos comunes. Si se presentan, comúnmente se encuentran en las siguientes áreas:
  • Punta o contorno del pene
  • En el escroto
  • Alrededor del ano
Los siguientes síntomas también pueden presentarse:
  • Sangrado
  • Comezón
  • Irritación
  • Infección bacterial secundaria con enrojecimiento, sensibilidad o pus
Diagnóstico Se puede diagnosticar la evidencia de verrugas genitales por lo siguiente:
  • Examen VisualUn doctor puede diagnosticar verrugas genitales por exploración visual. Si se encuentran verrugas externas, el cervix también se revisa por la presencia de verrugas.
  • PapanicolaoulLos resultados anormales de la toma de papanicolaou pueden indicar la presencia de HPV. No obstante, la prueba papanicolaou no es la prueba más precisa para el HPV.
  • Colposcopía y BiopsiaLa colposcopía es una prueba que le permite a su doctor identificar las verrugas que no pueden ser visibles. Una biopsia implica tomar una muestra del tejido para analizarla.
  • Prueba HPVUna parte o alguna células del área afectada puede revisarse para tipos específicos de HPV.
Tratamiento EL tratamiento para las verrugas genitales depende del tamaño y localización de las verrugas. El tratamiento sólo alivia los síntomas. No cura el virus. Debido a que el virus permanece, las verrugas u otras complicaciones pueden repetirse posteriormente. Los tratamientos pueden incluir: Tratamientos Tópicos Su doctor le recomendará uno de los siguientes tratamientos o soluciones para aplicarse en las áreas afectadas: Crema imiquimod (auto-tratamiento) Solución podofilin (aplicada por su doctor) Solución podofilox (auto-tratamiento) Crema fluorouracil (auto-tratamiento) Acido tricloroacético (aplicado por su doctor) Criocirugía, Electrocauterización o Tratamiento Láser La criocirugía (congelamiento), la electrocauterización (quemadura) y el láser son métodos que destruyen instantáneamente las verrugas. A veces se recomienda las extirpaciones quirúrgicas para verrugas mayores. Un medicamento antiviral llamado interferón alfa puede inyectarse directamente en las verrugas para evitar la repetición. Prevención La única forma de prevenir por completo la expansión de la infección HPV es evitar el contacto físico con una pareja sexual infectada. Los condones de látex pueden ayudar a reducir la expansión de la infección HPV y las verrugas genitales. Sin embargo, no son 100% efectivos, debido a que no pueden cubrir el área genital entera.Otras medidas de prevención son:
  • Abstinencia sexual
  • Relaciones sexuales monogámicas
  • Revisiones regulares para detectar enfermedades de transmisión sexual
  • Tomas de papanicolaou regulares para las mujeres que cumplan 18 años o inicien actividad sexual, lo que suceda primero